¿Qué es el
alcohol?
El alcohol es un depresivo que disminuye la
función cerebral y venenos del cuerpo. El
alcohol etílico o etanol es la química básica
que se encuentra en todas las bebidas
alcohólicas.
Forma de
consumo :
Principalmente bebido
¿Cuáles son
los efectos?
Categoría :
Depresor
Características : El alcohol etílico, o
etanol, es la sustancia química básica que
contienen todas las bebidas alcohólicas. Se
produce, generalmente, por la fermentación de
frutas, verduras o cereales. Las bebidas
fermentadas contienen como máximo un 15% de
alcohol puro (vino, cerveza, sidra). Las bebidas
destiladas, como es el caso de los espirituosos,
aperitivos y aguardientes, pueden contener hasta
un 45% de alcohol puro.
Las bebidas alcohólicas son, pues, más o menos
potentes o tienen grandes dosis de alcohol puro.
Estas bebidas pueden fabricarse siguiendo
diferentes recetas, aromatizados, azucarados,
mezclados, coloreados, etc. Es indiscutible que
para conocer sus efectos no hay que fijarse en
su composición sino el grado de alcohol puro que
contenga: sigue siendo la misma sustancia, y
produce el mismo efecto.
Introducido en el cuerpo humano como bebida, el
alcohol pasa enseguida a la sangre y ésta lo
transporta a los demás órganos, incluidos los
más sensibles: el cerebro y el hígado.
Efectos de carácter general :
PROCESO DE EMBRIAGUEZ
Una vez que el
alcohol está en la sangre, ningún alimento o
bebida puede retrasar o impedir sus efectos. El
azúcar de las frutas puede acelerar el proceso
de eliminación del alcohol en la sangre y
reducir la duración de sus efectos.
Como el alcohol pasa rápidamente a la sangre, la
alcoholemia comienza justo después de la
absorción. Alcanza su nivel máximo en menos de
una hora y disminuye sólo lentamente.
La embriaguez por alcohol se caracteriza por
tres fases típicas que se suceden: una fase de
excitación, un estado de embriaguez al cual
sucede un estado de depresión que puede
evolucionar hacia el coma.
La fase de excitación se caracteriza por
una sensación de facilidad intelectual y de
relación, también por la pérdida del control de
las funciones intelectuales y la liberación de
las tendencias instintivas. El sujeto no es
consciente de los riesgos (sobre todo al volante
de su coche) y pierde toda valoración objetiva
de la situación real.
La fase de embriaguez
se reconoce por la marcha inestable, la palabra
vacilante, el pensamiento confuso, la pérdida de
inhibiciones, gestos descontrolados y
descoordinados; se manifiesta por algunas
señales somáticas: pupilas dilatadas, náuseas,
vómitos o diarrea.
La fase depresiva
provoca sueño. A veces, la embriaguez puede
evolucionar hacia el coma; el sujeto en cuestión
está inmerso en un sueño profundo: pupilas
dilatadas, ausencia de reacciones ante
diferentes estímulos, vómitos y pérdida de orina
reflejan la gravedad de este estado, que, al
igual que coma tóxico, debe ser tratado en un
hospital.
Algunos casos de intoxicación etílica vienen
acompañados de alucinaciones, convulsiones o
delirios y pueden ser causa de reacciones
violentas. Las cuestiones de celos o
persecuciones son frecuentes cuando hablamos de
situaciones de delirio. En otros casos, la
embriaguez genera estados de depresión pudiendo
ser peligrosos, llegando incluso a conducir al
suicidio.
Estos efectos pueden entrañar también desórdenes
de equilibrio y de elocución.