El uso de las drogas
con fines religiosos, iniciáticos y médicos, se
remonta a mucho tiempo atrás. Sin embargo, el
incremento de su consumo es un fenómeno
reciente.
La guerra del opio
del siglo XIX
A finales del siglo XIX, después de haber
perdido las dos «guerras del opio» (1840-1842;
1856-1858) que enfrentaron a las grandes
potencias coloniales, China vio cómo se extendía
el uso del opio en todo su territorio, hasta el
punto de que lo consumía más de un tercio de la
población masculina adulta (alrededor de 25
Millones de personas). En 1906, China se
convirtió en el primer productor de opio del
mundo con 35.500 toneladas. En esta etapa, una
gran mayoría de la población consumía opio.
El siglo XX :
conflictos financiados por la droga
Una parte del dinero de la droga se destina a la
compra de armas, financia conflictos armados,
apoya movimientos terroristas y contribuye a la
dominación de los pueblos en el mundo.
Las primeras medidas
En Francia, la legislación sobre sustancias
venenosas es anterior a los convenios
internacionales, puesto que sus raíces proceden
de la antigua normativa sobre venenos. El primer
texto importante es un edicto de 1682 que se
aprobó tras una serie de crímenes por
envenenamiento recriminados a la Marquesa de
Brinvilliers, a Voisins y a Vigouroux. Este
edicto imponía la conservación de sustancias
peligrosas en lugar seguro.
A partir del 12 de julio de 1916, Francia se
dota de una normativa destinada a prevenir y a
frenar los destrozos causados por algunos
estupefacientes. La lucha contra la
drogodependencia y el tráfico de estupefacientes
es un tema que está muy presente en los trabajos
que se desarrollan en el seno de la Unión
Europea. La primera tentativa de cooperación
internacional, en cuanto a control de
estupefacientes, tuvo lugar en 1909, con motivo
de la celebración de la “Comisión del opio de
Shanghai”, que reunió a 13 países, entre ellos,
Francia. Esta comisión adoptó varias
resoluciones encaminadas a eliminar
completamente la producción y el consumo de
opio, y permitió la celebración de la primera
convención internacional del opio en La Haya en
el año 1912.
Los convenios internacionales
Los años 60 ven cómo se agrava la situación y
aumenta el consumo de drogas, tales como el LSD,
las anfetaminas y el cannabis. Para
contrarrestar este fenómeno, se firman varios
convenios bajo los auspicios de las Naciones
Unidas (ONU) :
1961 : Convenio único sobre
estupefacientes, mejorado mediante un protocolo
firmado en 1972.
1971 :
Convenio sobre sustancias psicotrópicas.
1988 :
Convenio contra el tráfico ilegal de
estupefacientes y sustancias psicotrópicas.
Estos convenios que
suscriben la prohibición de la producción, el
comercio, la posesión y el uso de drogas (salvo
con fines terapéuticos) han influido también en
las legislaciones nacionales de los países
signatarios. Actualmente, nuestra legislación se
rige por la ley de 31 de diciembre de 1970,
actualizada después en varias ocasiones.
Hasta ahora, 160 países han ratificado el
convenio de 1961, 149 países el de 1971 y 140
el de 1988.
Para lograr la fabricación de estupefacientes,
se necesitan unos determinados ingredientes. Se
ha instituido un sistema de vigilancia y de
control del tránsito de estos ingredientes para
evitar que lleguen a manos de los traficantes.